El Congreso de Oriente o Congreso de los Pueblos Libres o Congreso
del Arroyo de la China, fue una asamblea convocada por José Gervasio Artigas
en Concepción del Uruguay en dónde sabemos por varias cartas posteriores se
realizó en el mismo la primera Declaración de independencia de toda dominación
extranjera sobre los territorios que confirmaban la liga federal, hace exactamente hoy 209 años.
Los asistentes eran representantes de todas las provincias que integraban la
liga de los Pueblos Libres (Entre Ríos, Corrientes, Misiones, Santa Fe, Córdoba
y la Banda Oriental), en el marco de un proceso emancipador y fundacional para
la historia del federalismo, donde se consolidaron tempranamente los valores
democráticos de soberanía popular, autonomía provincial y, como dijo Artigas,
“Libertad en toda su extensión imaginable”.
Entre varios, uno de los aspectos notables del Congreso de los
Pueblos Libres fue su sistema de elección de delegados, en
primera instancia para una asamblea en Montevideo, pero suspendida ésta se lo
consideró válido para el Congreso de los Pueblos Libres. Se regía por una
notable circular en la que quedaba claro el voto universal,
sin distinción de clases, "encargando muy particularmente que los
ciudadanos en quienes la mayoridad de sufragios haga recaer la elección para
diputados, sean inmediatamente provistos de sus credenciales y poderes, y se
pongan con toda prontitud en camino".
El Reglamento enviado al Cabildo de Montevideo
era explícito: "Los ciudadanos de cada departamento concurrirán desde las
nueve de la mañana hasta las cinco y media de la tarde del día subsiguiente a
la recepción de la orden de esta data, a las casas que indiquen los respectivos
presidentes, a nombrar tres electores correspondientes a su distrito. El voto
irá bajo una cubierta cerrada y sellada: y el sobre en blanco. En la mesa del
presidente firmará todo sufragante su nombre en el sobrescrito, que también se
rubricará por aquél, y un Escribano que debe serle asociado. El Escribano
numerará y anotará los papeles entregados por los votantes echándolos en una
caja, que concluida la hora se conducirá cerrada al Muy Ilustre Cabildo, el
cual abrirá las cuatro sucesivamente, y cotejando en cada uno los votos con la
numeración y anotación procederá al escrutinio. (…) Se pondrá muy
particular esmero en que todo se verifique con la mayor sencillez posible,
cuidando que el resultado sea simplemente la voluntad general".
Quizás pueda afirmarse que la esencia política del federalismo
de entonces fuera el "sufragio universal" abierto a todos los que
desearan expresar su voto, sin distinción de ninguna especie, tan opuesto al
elitismo de las "clases decentes" del unitarismo. Así lo estableció
el Reglamento de 1815; también las constituciones de los "Pueblos
Libres" Santa Fe y Entre Ríos. Y lo admirable es que en aquellos tiempos
el sufragio universal era una novedad absoluta en todo el planeta.
En el Congreso, como estaba planeado, se trató la política
agraria y el comercio interprovincial y con el extranjero, resolviendo que se
confeccionara un reglamento para el fomento de la campaña, poblada por inmensos
latifundios que despoblaban y no explotaban las feraces pampas litorales. En
cumplimiento de ello, Artigas sancionó el 10 de septiembre de 1815
el "Reglamento Provisorio de la Provincia Oriental para el Fomento de
la Campaña y Seguridad de sus Hacendados", que fue la primera
reforma agraria de Latinoamérica. Consistía en la confiscación de
propiedades de "malos europeos y peores americanos", adversarios de
la revolución patriota, para distribuirlas y así ser leales con las bases
populares que constituían la fuerza del Artiguismo.
Algunas conclusiones
Este Congreso, destacado por diversos autores como el “primer
Congreso netamente federal de Hispano América”, habrá de señalar el apogeo
político de Artigas.
En él aparecen expuestos, con meridiana claridad, dos de los
principios que alumbraron su derrotero: independencia absoluta de todo poder
extraño a estos territorios, organización institucional federal para las
Provincias Unidas del Río de la Plata. Estos planteos, que colisionaban
abiertamente con los designios políticos que sostenía el puerto de Buenos
Aires, seguramente son los que llevaron a que este Congreso pasara
desapercibido en la historiografía oficial.
Celebramos este 2024 un nuevo aniversario del natalicio de Don Josè Artigas
Pensamos mucho que narrar, que decir en este humilde homenaje a quien fuera nuestra mejor maniobra politica en pos de la patria grande, la tarea no nos fuè fàcil, optamos por datos inèditos y algunos pocos conocidos, esperamos que les guste ya que es nuestro deber sentirnos orgullosos de ser Artiguistas.
Uno de los hechos pocos conocidos sucedió en Asunción en Junio de 1819 cuando un grupo de personas por cantar coplas a favor de Artigas fueron detenidas por orden de Gaspar Rodriguez de Francia; Narra Julio Cesar Chaves en su Biografía: El Supremo Dictador (1)
-El Dictador los hizo apresar y examinar bajo la fe del juramento para que declarasen cuál había sido el cantor de la “copla ofensiva a la quietud del Estado” y común causa, dónde y con quiénes se juntaron para salir esa noche, quiénes le enseñaron, y por último, quiénes le indujeron a que saliesen a cantar por las calles dicha copla. ... la ilusión Artiguista perduró muchos años en el Paraguay.
En una clara noche asunceña marchaba por las calles un grupo en son de parranda: eran el cadete Baldomero, el guitarrista Domingo Irrazábal, el cantor Baltasar Galiano, Juan Manuel Cantero y algunas damas. De pronto el vecindario de las casas de Viana(2) en la calle que gira para San Francisco fue despertado por una copla cantada en voz alta atrevida y escandalosa que perturbó el silencio de la noche, copla atroz según el denunciante,…. Los versos que cantaba Galiano, acompañado en la guitarra por Irrazábal, y que significó largos años de cárcel para los del grupo, comenzaban así:
"Viva el general Artigas, su tropa bien arreglada;"...(3)
Nuestros recuerdos y homenaje a este grupo de Artigueños.., en esta fecha tan especial para todos los Artiguistas.
Esto
indica que la ilusión Artiguista perduraba en el Paraguay, poco más de
un siglo adelante en 1928 un investigador se lleva una sorpresa al
encontrar unas composiciones en estrofas, descubre que de las mayúsculas
de la composición firmada por Fulgencio resultaba el siguiente
acróstico: AL AMIGO ILUSTRE DON JOSE ARTIGAS MILITAR VALIENTE y que el
acróstico de la otra era: AL TRIBUNO PARAGUAYO FULGENCIO YEGROS DEL
COMPAÑERO ORIENTAL. ¡Tratábase, nada menos que de una carta al destacado
patriota Fulgencio Yegros para su amigo y de la respuesta de José
Artigas a su compañeros de otros tiempos!. La letra de la composición
era la misma que aparece en los documentos que le pertenecen en el
Archivo Histórico en Asunción. Tambien Fernando de la Mora dedicó un
interesante acróstico el gran Blandengue. El descubrimiento de los
acrósticos fue un estímulo para estudiar las relaciones de Artigas con
Yegros y de la Mora. Gracias a esa investigación se pudo seguir el hilo
que permitió entrar y salir del laberinto formado por las noticias
confusas acerca de los motivos que determinaron a Artigas a entrar en el
Paraguay. Pasemos
ahora a las estrofas de Fulgencio que son las mismas coplas por las que
fueron detenidos aquel grupo de jóvenes.en 1819, estas decimas
desarollaban un pensamiento que traslucía la idea de una antigua
esperanza no lograda, la patria grande, decían así::
Aunque digas o no digas
lo que siente tu corazón:
repites el nombre de Artigas,
por salvador de nación.
Viva el general Artigas,
su tropa bien arreglada;
lejos de malas intrigas,
tiene la causa ganada.
En
el campo de las ideas el gran defensor de la democracia americana, Artigas llevó a cabo varias revoluciones:
-La revolución americana contra el imperio español y el portugues, la revolución republicana contra la nobleza, a la manera de EEUU y Francia la revolución federal, contra las pretensiones centralistas de Buenos Aires, la revolución social, cuando creó en Arerunguá la primera reserva india, por
oposición a las reducciones aculturizantes de los españoles.....
La Provincia de Entre Ríos, en la Argentina , conmemora desde 1987 oficialmente el dia de la bandera que es la creada por Artigas-
-Fructuoso Riveraescribía a Francisco Ramírez expresando sus
motivos y sus deseos de ultimar “al tirano de nuestra
tierra”, José Gervasio Artigas Arnal
204 años se cumplen desde el 13 de junio de 1820, Artigas
y Ramírez se veìan la caras chocando en la batalla de Las Guachas, cerca del arroyo
Cala / Río Gualeguay (departamento de Tala, Entre Ríos, Arg.). Se enfrentaban
frente a frente 2 hombres ex-amigos, hermanos de cabalgatas y batallas, uno luchaba por la vida y nuestros principios, el otro, Francia lo sentenciaría meses
más tarde llamándolo de "pobre peón, que era, Artigas lo había levantado y hecho
gente... "Veinte cargas de caballería, y pocos muertos. Difícil situación para
Artigas, trágico dolor para la causa de la Liga de los Pueblos Libres, estaba claro
que ya no eran del mismo bando. La batalla, Artigas gano, Ramírez seretiró… (varios artículos dan como indeciso e
incierto el resultado por la actitud de Pancho Ramírez), En las Guachas se midieron,
no desde lo militar, Artigas cerro el día teniendo claro la defección de
Pancho. Las Guachas fue testigo de la destrucción de un sueño que meses atrás
fue mutuo. Ubicación las GuachasAquí
Ese mismo día, 204 años atrás, del lado Oriental del Río
Uruguay, ya con uniforme portugués, José Fructuoso de la Rivera y Toscana
escribiría una segunda carta a Francisco Ramírez, pidiendo la cabeza de Artigas
y ofreciéndose a matarlo. La existencia, de las cartas,no forman parte del curriculum educativo y "recièn en el 2022-3" ingreso el documento en la colección de la Comisión Nacional Archivo Artigas en el tomo numero Trigèsimoctavo.
Fragmentos de la primera:
Lunes 5 de junio
de 1820 de Rivera a Ramírez
“..Será salvada la humanidad de su más sanguinario
perseguidor. Los monumentos de su ferocidad existen en todo este territorio;
ellos excitan a la compasión y mucho más a la venganza”.
Fragmentos de la segunda:
Martes13
de junio de 1820 de Rivera a Ramírez
“Todos los hombres, todos los Patriotas, deben sacrificarse hasta lograr destruir enteramente a Don José Artigas; los males que ha causado al sistema de Libertad e independencia son demasiado conocidos para nuestra desgracia y parece escusado detenerse en comentarlos, cuando nombrando al monstruo parece que se horripilan”.
Ya aferrado a otra causa, Rivera agrega: “No tiene otro sistema Artigas, que el de desorden, fiereza y despotismo; es escusado preguntarle cuál es el que sigue. Son muy, son muy marcados sus pasos, y la conducta actual que tiene con esa patriota Provincia justifica sus miras y su Despecho”.
Y para culminar: “Con respecto a que yo vaya a ayudarle, puedo asegurarle que lo conseguiré, advirtiéndole que debo alcanzar antes permiso Especial del Cuerpo Representativo de la Provincia para poder pasar a otra, mas tengo fundadas esperanzas de que todos los señores que componen este Cuerpo no se opondrán a sus deseos ni los míos cuando ellos sean ultimar al tirano de nuestra tierra”. .
Perro que ladra… no
muerde, pero advierte.-Sus jefes, los portugueses, le negaron el permiso…, bueno hubiese sido
narrar el cruce de miradas del ingrato traidor, con el caudillo, fácil desde
una carta llamarlo monstruo, déspota; frente a frente, dudamos se hubiese animado. Mediante
esta carta no solo pretende matar, “hacer desaparecer” a Artigas, sino que
junto a él a todo su ideario político y social... Rivera se transformaría años
más tarde en justamente la persona quien serìa el primer Presidente de la
República, el que va a dar la pauta inicial de cómo llevar el País adelante, El
estado Oriental del Uruguay. Luego nos preguntamos porque Artigas no regreso al territorio que lo viò nacer bautizado como "Uruguay"....
Autenticidad de las cartas: Las mismas fueron escritas por el amanuense(secretario) de Rivera , algo muy normal en la época más para los que conocen de paleografía Fructuoso tenía muchísimas faltas horriblemente ortográficas, pero era bueno en su redacción conteniendo un estilo contradictorio y muy característico en la narrativa. Las firmas si son de él. Se encuentran en el Archivo de Corrientes, calle Pellegrini 1385, sala 2, Don Hernán Félix Gómez, Correspondencia oficial Nro-7, años 1810-1921, tomo 09, folios 053 al 055 Si bien algunos hasta ahora pueden sorprenderse, pasaron 187 años en aparecer públicamente… Tal vez, Pivel Devoto, de ideas conciliadoras de los partidos, entendamos esto como luces, sabría de la existencia o contenido.. o también, entendamos esto como sombras, se dice que y es probable que hacia 1950 había una "especie de orden" del gobierno de que todo documento que afectara la figura y la imagen de los partidos políticos o de héroes nacionales no se publicara.
Algunos relatos o menciones sobre las mismas fueron escritos al parecer por:
- Hernán F. Gómez :“Corrientes y la República Entrerriana” (1929, págs, 50 y 53, Corrientes, Rep. Argentina) Gómez(1888-1945) fue profesor , periodista , magistrado y académico Correntino. - Raúl Setiembre Vera, Aclaraciones Históricas, La prueba de una gran traición pag.5, 1937 - Reyes Abadie, Bruschera y Melogno, “Documentos de Historia Nacional y Americana: el ciclo artiguista”, (1951, tomo II, págs 621/625) Eduardo Salteraín y Herrera em 2 obras, “Lavalleja” (1957, nota al pie número 27, página 58) y “Rivera, caudillo y confidente” (1945, nota 18) -Juan Bautista Silva en “Rivera Político” (1949, pág. 17 y pág.26) -José Eduardo Picerno, La Republica, Roger Rodríguez 2007. Conocimiento público de la copia real, facsímil, aclaremos esto, hasta el momento nunca se había publicado para llevar el análisis paliográfico, solo habían sido transcriptas, ahora digitalizadas. - Maiztegui Casas, Lincoln. Orientales. Una historia política del Uruguay. Tomo I. De los orígenes a 1865. 2010 Planeta -G.Abella, O.Montaño y A. M.de Freitas también citan las mismas en sus trabajos.
PD, Para quienes piensen en forma gallarda que las cartas anteriores de Rivera manifestaba otra postura, sonmàs de eso mismo, anteriores!, las mismas puede que se encuentren en Chile.
Reproducimos en esta oportunidad las palabras que dirigiera Artigas a su ex aliado Ramírez en abril de 1820, acusando al caudillo entrerriano de traición y entrega a las fuerzas directoriales.
“El objeto y los fines de la Convención del Pilar celebrada por vuestra señoría sin mi autorización ni conocimiento, no han sido otros que confabularse con los enemigos de los pueblos libres para destruir su obra y atacar al jefe supremo que ellos se han dado para que los protegiese; y esto es sin hacer mérito de muchos otros pormenores maliciosos que contienen las cláusulas de esa inicua convención y que prueban la apostasía y la traición de vuestra señoría.
Al ver este atentado no he podido vacilar y he corrido a salvar al provincia entrerriana de la influencia ominosa de vuestra señoría y de la facción directorial entronizada en Buenos Aires, que ya la destinan a entregarla también al yugo portugués; y yo lo he hecho no sólo porque así me lo imponen los altos deberes del puesto que me han dado los pueblos, sino en resguardo de la Banda Oriental, cuya ruina quedaría consumada si yo permitiese que vuestra señoría y aquella infame facción de legistas entregaran al enemigo la costa entrerriana.
Vuestra señoría no puede negarme las pruebas de su arrepentimiento por haberse mostrado tan indigno de la confianza que le hicieron los pueblos libres y tan ingrato de los beneficios que ha recibido de su protector… Vuestra señoría debe ver que con su conducta audaz e imprudente provoca mi justicia y la autoridad que ejerzo como jefe supremo y protector; pues por mis antecedentes y la amplísima confianza que los pueblos han depositado en mí, no puedo excusarme de pedirle cuentas, y de prevenirle que si no retrocede en el camino criminal que ha tomado, me veré obligado a usar de la fuerza, pues yo también tengo que arrepentirme de haber elegido a vuestra señoría y de haberlo propuesto el amor de los pueblos libres para que hoy tanga los medios de traicionarnos. Estando íntimamente interesado en que estos pueblos no se anarquicen y caigan en manos del portugués, resolví pasarme a Entre Ríos… Vuestra señoría ha tenido la insolente altivez de detener en la Bajada los fusiles que remití a Corrientes. Este acto injustificable es propio solamente de aquel que habiéndose entregado en cuerpo y alma a la facción de los pueyrredonistas, procura ahora privar de sus armas a los pueblos libres para que no puedan defenderse del portugués. Esta es una de las pruebas más claras de la traición de vuestra señoría y de la perversidad que se ocultaba en la Convención del Pilar; y no es menor crimen haber hecho ese vil tratado sin haber obligado a Buenos Aires a que declarase la guerra a Portugal y entregase fuerzas suficientes para que el jefe supremo y Protector de los Pueblos Libres pudiese llevar a cabo esa guerra y arrojar del país al enemigo aborrecido que trata de conquistarlo. Esa es la peor y más horrorosa de las traiciones de vuestra señoría.»
José Gervasio Artigas
Fuente: Carta de Artigas a Ramírez, de abril de 1820, Editorial Marcha, Montevideo, pág. 185-186; en Norberto Galasso, Artigas y las masas populares en la Revolución, Cuadernos para la otra historia, 2000, Centro Cultural “Enrique Santos Discépolo”.
Suele creerse que Artigas residió en una casa mansión con balcón que le construyo Gaspar R. De Francia o en todo caso Carlos A. López, (edificio de la escuela), también que (contrariando a Beaupiere) era sumamente rico y que su hijo José María le trajo más dinero en 1846 entre otras tantas historias.. pero también suele creerse que habito en el preciso lugar en dónde se encuentra la escuela Artigas del Solar Asunceno, en la entrada del Jardín Botánico de Asunción, y que su rancho estaba debajo del Ibirapitá (Yvirapytá), pero esto no es asì, leyendo algunos antiguos libros y comenzando a recorrer la historia en forma cronológica, podemos percibir que se creo o tomo como narrativa oficial en lo que refiere a la presencia de Artigas en Ybiray específicamente, una historia escrita que compete a un periodo de construcción de la figura de Artigas como procer, imagen, textos homenajes etc., esta oralidad, que no concuerda del todo con los hechos, desvirtua los mismos bajo el lema de hermandad de los pueblos, convirtiendo los mismos en leyenda y hasta mito si se quiere decir (ante la falta de datos aparecen los estados de conciencia magica, las creencias...este caso en particular es bien extraño) En lo que refiere al tema de la ubicación de la casa y al famoso árbol, pasaremos a desempolvar lo que hallamos y creemos, las conclusiones, son bien personales y no cabe a nos las razones, indole y motivos. La historia bien escrita en 1885, la cual se sigue omitiendo, es bien fundamentada en este humilde blog, ademas de justificada y reconocida, aqui se la presentamos, porque creemos que es importante.
Determinar un lugar, un punto preciso geográficamente no representa
siempre el lugar de los hechos, muchas de las conmemoraciones o
celebraciones se realizan aproximadamente en lugares cercanos en base a que la zona o
territorio es muy amplio, ejemplo: las batallas. En este caso el
reconocimiento fue realizado oficialmente, pero triste e
inexplicablemente es omiso a la historia que todos conocemos…hasta
ahora como ya lo mencionamos.
Comenzamos;
Los primeros aportes y o referencias sobre casa
y árbol no llegan de la mano de José María Artigas, 1846, ni de Isidoro
de María en 1860, ni de las visitas que recibió Don José, sino de la
devolución por parte del Uruguay de los trofeos de guerra (GTA), al
Paraguay en Junio de 1885.
Las cronicas sobre los hechos despiertan nuestra atención, precisamente 3 imágenes fotográficas de época nos provocan dudas, y desviamos la mirada comenzando a revisar la información
al respecto y a cotejar con la historia oficial creada por diferentes publicaciones posteriores a 1903 hasta el presente en donde una nueva versiòn en forma retorica surge como real, cuando la verdad al parecer es otra, en cierta forma le llamamos Copy past = Historia
desinteresadamente mal contada, entre otros…
Historiografía.
Tras 25 años de vivir en Curuguaty al noroeste del Paraguay, en 1845 Artigas es invitado por Carlos A. López a residir en la zona de Trinidad, en el predio familiar donde se encuentra su casa Quinta, llamado este lugar como Ybiray, hoy Jardín Botánico y Zoológico, en el año 1846 recibe la visita de explorador, periodista y médico francés Alfred Demersay, el cual realiza 2 dibujos, el del único retrato que se conoce de su fisonomía e inspira a la reconstrucción posterior de otros artistas (cabe recordar que varios autores de la época adjudicaron esta carbonilla a un teniente de apellido Bravo y posteriormente a Bonpland) y otro dibujo es del lugar, titulado: Casa de Artigas en Ybiray, ambos aparecen en su obra de 1860 llamada: Histoire physique, économique et politique du Paraguay et des établissements des Jésuites.
La
Banda de Músicos y una Sección del Batallón 5° de Cazadores. Por este
gesto, la plaza San Francisco de la ciudad de Asunción cambió su nombre por el de Uruguay
Estas imágenes, son acompañadas de fundamentos y es ahí en donde aparecen las publicaciones escritas al respecto, citare las fuentes al final del articulo, pero antes compartimos dos textos irrefutables que respaldaran el cometido del post:
"El Orden" 9 de Junio 1885
El lugar donde murió Artigas
Reportaje
A
las 12:30hrs del día sábado 6 del corriente partió de la estación
central hasta Trinidad un tren expreso conduciendo a las ilustres
personas portadores de nuestras reliquias, al Presidente de la
República, al piquete y a la Banda Oriental.
No
obstante haber dado uno de los diarios de la capital algo al respecto a
lo que ha tenido lugar allí, creemos deber hacerlo a nuestra vez,
quizá, con mejores datos por haber presenciado todo. Un sagrado deber
les llamaba en la Trinidad a los hijos de aquella ínclita y heroica
nación. Allí vivió en sus últimos tiempos de su vida el fundador de la
nacionalidad Uruguaya. Allí vivió el esforzado campeón que por libertar a
su patria se vio en la imperiosa necesidad de amasar con sus lágrimas,
el negro pan del ostracismo por la ingratitud de los hombres. Allí, en
fin, se apagó la preciosa vida del inmortal Artigas, ante cuyo nombre se
inclina hoy reverente un pueblo en señal de gratitud. Quisieron visitar
nuestros dignísimos huéspedes aquel lugar sagrado por más de un
concepto y así lo hicieron demostrando a propios y extraños que son
dignos de la patria que llegan al padre común de los Orientales.
El
tiempo todo lo destruye; apenas se ven los cimientos de la casa donde
pagó el tributo debido a la naturaleza aquel grande hombre, cuyas
veneradas cenizas descansan hoy entre los suyos. Un algo de sublimidad
se notaba en el aspecto de esas ruinas. Aquel lugar tenía en esos
momentos ciertos encantos que lo hacía doblemente poético e interesante.
Un suave vientecillo acariciaba mansamente las hojas de los árboles en
cuyos pliegues parecían leerse en nombre de aquel peregrino a quien la
muerte le sorprendió, como dijo el Doc. Castro en esa ocasión,
quinientas cuarenta leguas de su hogar. Todos y cada uno de los señores
examinaban cuidadosamente objeto por objeto creyendo ver en ellos un
algo que diese idea siquiera del que ha treinta y tantos años supo
darles vida con su presencia. ¡Cuántas veces, dijo uno habrán
sorprendido estos árboles en los ojos de Artigas lágrimas de dolor al
recordar a su patria! Al ver una planta de naranja muy vieja que se
encuentra inmediato del lugar donde había estado la casa, dijo el
General Tajes:
¡Cuántas veces en la sombra de este árbol habrá toma do mate Artigas! Y mandó sacar un gajo para llevar a su Gobierno.
Otros
arrancaron hojas de naranjo de la planta que dio sombra a Artigas y se
pusieron en el ojal de la levita en señal de reconocimiento.
El Doc. Forteza trajo un pedazo de piedra para llevar a Montevideo, sacada del cimiento de la casa que fue vivienda de Artigas.
El tema obligado de las conversaciones, en fin, era el ilustre finado.
El
General Tajes pronunció un sentido discurso al frente de las tropas que
en ese mismo lugar estaban en formación, recordando haber fallecido en
ese mismo lugar el más ilustre de los orientales.
La banda de músicos entonó los himnos Oriental y Paraguayo.
Hicieron
uso de la palabra los doctores don Carlos de Castro y don Lindoro
Forteza, el primero a nombre del Poder Legislativo de su patria y el
segundo en nombre del Poder Judicial, invocando cada uno las virtudes de
aquel grande hombre.
Se labro un acta que ha sido firmada por todos los concurrentes.
Mandaron
sacar varias fotografías una de la Comisión Oriental portadora de los
trofeos con el piquete y la banda de música en formación; otra en la
misma posición incluyendo los acompañantes; otra de la Comisión al pie
del naranjo de que hemos hablado más arriba y otra de las gentes del
pueblo que concurrieron atraídas por la curiosidad
Este cuadro será en extremo interesante por la originalidad de la posición elegida al efecto.
Se
sentaron en el pasto, entre el populacho, todos los señores
comisionados, incluso el Presidente de la República y cuantos quisieron
hacerlo; el doctor de Castro con una indiecita de un año de edad medio
desnuda en la falda, el señor Granada apoyado en dos negritos de los
tantos que había; el Ministro Brizuela y el Comandante Ortiz medio
echados.
El cuadro era extravagante, pero bonito.
Anduvieron
como dos horas por allí, visitando la hermosa casa de la Señora López
de Barrios que queda unos treinta pasos de la casa que ocupó el General
Artigas.
Del
segundo piso contemplaron largo rato el majestuoso panorama que queda
en frente, de donde se distingue claramente las olas del agitado río, se
domina la Ciudad, el Hospital potrero y el Gran Chaco hasta perderse de
vista.
¿Dónde
están esas notabilidades en la pintura, dijo el General Tajes, para
trasladar en el lienzo ese hermoso paisaje? ¿Dónde están los poetas, por
qué no vienen a templar sus liras en esta privilegiada tierra? A la
verdad, estaba sublime aquello, encantado puede decirse. A las cuatro de
la tarde regresaron todos a caballo excepto el piquete y la banda de
música que vinieron en el tren. El Soldado de Artigas - Sabemos que los
señores de la Comisión han mandado al antiguo veterano Manuel Antonio
Ledesma, compañero del General Artigas, fuerte suma de dinero, y a la
vez le mandó al señor García la mensualidad acordada a su favor por el
Gobierno Uruguayo.
Informe y relato
Asunción, 7 de Junio 1885
Al Señor Presidente de la República Oriental.
En
este momento regresamos de Trinidad, lugar en que murió el General
Artigas. Nos transportamos allí en tren especial, con el Señor
Presidente de la República, muchos caballeros
paraguayos
y el piquete y banda Oriental con banderas. Descubrimos los cimientos
de la casa en que murió el padre de nuestra nacionalidad. Ante esos
sagrados vestigios, las bandas de música dejaron oír el Himno Oriental
seguido del paraguayo. El General Tajes pronunció en esos instantes un
bellísimo y elocuente discurso, así como los doctores Castro y Forteza.
Fue este un acto enternecedor a la vez que entusiasta, cuyo recuerdo
será imperecedero. Se sacaron vistas fotográficas y se recopilaron mil
reliquias de aquel suelo para nosotros tan sagrado. El que suscribe
labró acta que firmaron todos los presentes, autentificando los hechos
que si hasta aquí eran tradicionales, de hoy más revista los caracteres
de un reconocimiento oficial. Las referencias que en la memoria de éstas
nobles gentes se conservan del sitio precioso en que rindió a Dios su
gran espíritu el gran Artigas, ha pasado desde hoy a la historia con
caracteres indelebles.
El
nombre de V.E. ha sido cariñosa y entusiastamente unido a este acto,
como lo es en todos los que lleva a cabo esta Comisión en el suelo en
que murió pensando en su Patria nuestro héroe inmortal; y hemos enviado a
V.E. un saludo y una felicitación que reiteramos en este momento. Por
la Comisión - Carlos de Castro.
Ubicacion señalizada - demarcada desde arriba
Esta acuarela datada en 1889 es obra de Corsetti, se nota la altura del lugar (casa alta) y la pendiente, al fondo se visibiliza la iglesia de la Trinidad, en la misma aparecen los cimientos de la casita de Artigas El gran acuarelista realizo varias obras para el gral Santos y gracias a esta imagen podemos ver que hizo caso omiso a las palabras de Tajes el dia del reconocimiento del lugar:
¿Dónde
están esas notabilidades en la pintura, dijo el General Tajes, para
trasladar en el lienzo ese hermoso paisaje?
Esta obra del viaja el Paraguay se puede apreciar en un libro del acervo del Museo Historico del Uruguay de 1952, sobre la visita del autor encontramos el siguiente material de Corsetti en esos años aqui
FOTOGRAFIA - ACUARELA
En donde se lee la Letra IS de Santisima se encuentra la Iglesia
de Trinidad, La calle Artigas seria el camino que se observa en la
acuarela de Corsetti
Escuela Artigas Asunciòn 1928 Revista El HOGAR Argentina
La casa alta sirvio como edificio de la Escuela Agricola, el relato arriba es mas que esclarecedor, el mismo es de un material llamado:
José Artigas, jefe de los Orientales y protector de los pueblos libres
Investigador en el lugar de los cimientos de la casa de Jose Artigas
Otro de los periodicos que publico los mismos hechos fue El Heraldo, notese la fecha del mismo en el borde superior derecho.
Vista del balcon de la casa alta, (no centrada como eje o medio los cimientos, pero da una nociòn de la altura del terreno)
Postales de Asuncion de Antaño vol 2, pagina 109, Arqto Jorge Rubianni
Dupuy es parte de la primera peregrinacion al Solar Asunceno en 1911, en su libro Artigas en el Cautiverio, nos presenta entre muchos datos, valiosa informacion acerca de los puntos en el cual se centra este post, nos dice que Segundo Decoud, gran conocedor de la vida de Artigas fue quien dio a conocer que a Artigas le gustaba lo llamen Don Jose,nos cuenta que en el preciso lugar de los cimientos seria erigido un monumento a Artigas... tambien nos narra en su ultima pagina que pensaba dar su discurso en este viaje en el Manduvi Guasu (que aun permanece vecino a la casa baja de Lopez, hoy admin del JBZA) y por sugerencia del gob Uruguayo lo tuvo que realizar en el Ibirapita...
-Otra persona que manifiesta llevar cimientos es uno de los hermanos Hammerly, los dono al museo Rivera y no se encuentran hoy en dìa ahi!
Artigas en la poesía de América, Volumes 1. Página 26 . Editorial Noel, 1951 ...
Contributors, Daniel Hammerly Dupuy, Víctor Hammerly Peverini.
Por otra parte , el pintor Eduardo Carbajal realiza 2 obras de Artigas en Paraguay, una, con certeza cerca de 1865 ya que la carbonilla de Deemersay aparece en 1860 por primera vez, y la segunda en 1872, como se puede apreciar El Gral Don Jose aparece sentado bajo la sombra de ...no es una palmera, es un banano!!
La presente investigación fue elaborada
hace algún tiempo (año 2016), a partir de
la realización de un video que compartímos en las redes en el 2021 decidimos ampliar y publicar. Las
conclusiones que analizamos y exponemos aquí son realizadas con absoluto
respeto por las personas que aparecen en la misma y por su memoria, en
particular por Don José Gervasio Artigas Arnal y las personas que le
acompañaron en su residencia en Asunción del Paraguay, por tal motivo
agradecemos a quienes colaboraron de una forma u otra por brindarnos su
tiempo, información y materiales y conocimiento.
Revisión, rescate, corrección y reconocimiento principalmente es el eje transversal de este post.
FUENTES DE ELABORACIÒN
Biblioteca Nacional del Uruguay (fotografías) - Programa Memoria del
Mundo UNESCO (Museo Histórico Nacional "GTA: presentaciones
iconográficas y cartográficas" - Colección Legislativa de la República
Oriental del Uruguay (recopilación cronológica, Matias Alonso Criado,
Tomo 10) - Registro Oficial de la República del Paraguay correspondiente
al año 1885 (leyes y decretos) – La devolución de los Trofeos de Guerra
del Uruguay al Paraguay ( Laura Reali) - Archivo General de la Nación,
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